En el municipio de Praxedis G. Guerrero, en Chihuahua, México, la adrenalina está a tope por la incontrolable violencia del crimen organizado. Ante un gobierno local débil e impotente, la estampa del miedo se refleja en los rostros de los lugareños. Hasta el cura, el mayor líder moral de la cabecera municipal, tuvo que huir por las amenazas de los narcos y el gobernante Partido Acción Nacional (PAN) enfrentó problemas para elegir candidatos ya que nadie quería postularse por temor a ser víctimas de los criminales. Lo mismo ocurrió con el departamento de policía: no hubo aspirantes a la jefatura hasta que surgió una voz joven, femenil, aguda, que dijo: "Yo".
Y así, Marisol Valles García, de 20 años, delgada, de rostro afilado, ojos negros, madre de un bebé, casada, aceptó ser jefa de policía de uno de los municipios más peligrosos de México. Ha tomado posesión del cargo con miedo, casi sin dinero, desarmada, sin escolta, sólo impulsada por sus ideales, por su mística de la no violencia y por la convicción de que fortaleciendo a la familia, a los jóvenes y promoviendo el desarrollo social se combate la criminalidad a fondo.
En charla telefónica esclusiva para Aol Latino, ella ha salido al paso a quienes -como el gobernador de Chihuahua, César Duarte- dudan que pueda tener una gestión exitosa, debido a la inexperiencia de sus pocos años. Y afirma, contundente: "No importa la edad sino lo que uno cree, sus valores, sus sueños".
Marisol, con estudios de criminalística, es enfática al resaltar que aceptó el cargo luego de platicar con su familia y su esposo durante un mes ya que se trata de una oportunidad de concientizar a los padres, a los hijos, a los jóvenes, a los adultos de los trascendental que es tener un núcleo familiar fortalecido como célula vital de la sociedad y de promover la cultura.
Impulso social y no combate frontal
"Sólo impulsando principios familiares se combate a la delincuencia", es su tesis que se encarga de difundir a diario, yendo a las casas, a las escuelas, a los campos deportivos, a los centros de trabajo. Es la consigna que ha dado a las mujeres policías que atenderán a los nueve sectores en los que Marisol ha dividido a la ciudad, distante a unas 80 millas de Ciudad Juárez, con una población de unos 10 mil habitantes y de poco más de tres mil en la cabecera municipal.
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Marisol Valles García
La estudiante de criminología Marisol Valles García, de 20 años de edad, escucha una pregunta durante una conferencia de prensa después de juramentar como la nueva jefa de policía en una peligrosa área fronteriza, en Praxedis G. Guerrero, cerca de Ciudad Juarez, México, el miércoles 20 de octubre de 2010.
Marisol Valles García, que finalizó sus estudios y está escribiendo su tesis, prestó juramento miércoles 20 de octubre para traer la ley y el orden a este pueblo ubicado al este de Ciudad Juárez y habitado por unas 8,500 personas, alguna vez una agrupación de tranquilas comunidades agrarias hasta que el cártel de Sinaloa y el de Juárez comenzaron a enfrentarse por el control de su única carretera.
La pequeña pero enérgica Valles García dice que quiere cambiar las cosas con una mezcla especial de vigilancia comunitaria efectuada por sus 12 agentes.
"Mi gente está allá afuera, yendo de puerta en puerta, buscando delincuentes y, donde no hay, tratando de enseñar valores a las familias", dijo.
Sea considerada valiente o temeraria, su decisión ciertamente indica lo desesperada que se ha vuelto la situación en el Valle de Juárez, un lucrativo corredor de narcotráfico paralelo a la frontera con Texas.
Los residentes locales dicen que los cárteles de las drogas toman control del pueblo por las noches, recorriendo las calles en caravanas de camionetas deportivas y pickups, con fusiles automáticos e incluso de calibre .50. El vicealcalde del vecino El Porvenir y el alcalde de Distrito Bravos fueron asesinados recientemente después de haberse refugiado en Ciudad Juárez.
"Cada sector estará a cargo de una mujer, conviviendo con las familias, con los niños, con los adultos mayores para ver sus necesidades y plantearlos los principios y valores, atendiendo lo que realmente necesitan y escuchándolos", dijo. Proyecta, además, la creación de una policía ciclista y ha llamado a los padres de familia para que participen en los programas preventivos de vigilancia afuera de los planteles.
Esa es su fórmula, agregó, para "cambiar el miedo por la seguridad". Marisol tiene a su cargo tareas de prevención del delito ya que el enfrentar al crimen organizado es tarea inherente del ejército y los cuerpos de seguridad del estado. Sin embargo, su propuesta contra el creciente crimen en México, ha recibido total apoyo. Programas análogos le han propuesto al gobierno de Felipe Calderón desde el inicio de su gestión pero han sido desdeñados de manera sustancial ya que ha preferido el combate frontal, lo punitivo, dejando casi de lado el impulso a lo social, como lo consideran múltiples observadores críticos. Afirman que la pobreza en que viven más de 50 millones de mexicanos, la falta de oportunidades plenas de desarrollo escolar para la juventud, el desempleo y la ausencia de una estructura y política deportiva, son caldo de cultivo para el florecimiento del narco.
Pusó en el mapa a Praxedis G. Guerrero
Y Marisol logró en pocos minutos lo que nadie: poner en el mapa al neurálgico municipio de Praxedis G. Guerrero, nombre que corresponde a un general revolucionario. Fundado en 1849, es un sitio yermo, zacatoso, desértico, con pocos atractivos turísticos, con 27 localidades rurales y una extensión de 808.97 kilómetros cuadrados, donde la población trabaja, sobre todo, en la producción de algodón. Además, al norte y este colinda con Texas, a donde se ingresa al través del puente internacional Forthancock.
La tranquilidad provinciana fue rota, al menos desde hace una década cuando el se convirtió en estratégica para el trasiego de drogas, dada su vecindad con Texas, por donde los capos mexicanos pasan la mayor parte de sus cargamentos hacia la Unión Americana. Es una zona con etiqueta roja, por caliente y altamente peligrosa.
El municipio de Praxedis forma parte del llamado Triángulo de la Muerte, al que se suman Ciudad Juárez y Guadalupe, que forman el Valle de Juárez. Es un área con luchas diarias entre los carteles de Juárez y Sinaloa, que no sólo se atacan entre ellos sino que también ya lo están haciendo en contra de la población civil hasta con coches bomba. En esa zona fue asesinado en días pasados un estadounidense que integraba la Guardia Nacional en Texas. Los registros oficiales dan cuenta de 7,000 fatalidades en dos años. Debido a ello, el éxodo ciudadano es creciente. El sitio de Estados Unidos a donde han ido buena parte de los que huyen es a la ciudad de Oklahoma.
'Quieres plomo o quieres plata'
Uno de los modus operandi de los narcos es llegar a las oficinas de los funcionarios y encima de sus escritorios les ponen una pistola y un fajo grueso de billetes y les dicen: " Qué quieres plomo o plata", según un subsecretario estatal, quien pidió no revelar su nombre.
"Aceptamos nuestra debilidad. No podemos con ellos (los narcos)", fue contundente el alcalde de Praxedis, José Luis Guerrero.
Por eso nadie quisó ser jefe de la policía. Marisol fue la única que aceptó.
¿Miedo a la muerte?
El pasado miércoles, ella fue presentada como nueva titular del cuerpo de policía en la biblioteca municipal, que forma parte de un conjunto de edificios oficiales en cuyas paredes y ventanas aún se hacen evidentes las huellas de las ráfagas disparadas por los esbirros de los barones de la droga. Apenas la semana pasada fueron acribillados el comisariado ejidal de El Porvenir, Rito Grado Serrano y su hijo Rigoberto.
¿Miedo a la muerte?, le preguntó el reportero. Y Marisol, respondió con un lacónico: "El miedo existe, es natural en el ser humano". No obstante lo peligroso de su tarea, considera la designación como "un gran logro". "Todo trabajo trae su sacrificio, pero lo puedo aceptar mientras sea para bien del municipio" , dijo.
Tan atípico nombramiento en tiempos de la cresta criminal ha provocado que buena parte de la opinión pública internacional voltee hacia esta joven, quien tendrá un salario de ocho mil pesos mensuales -unos 660 dólares-, o sea, menor a lo que perciben los uniformados en Ciudad Juárez, la urbe mexicana más peligrosa, pese a los nutridos contingentes militares que la custodian.
Arcas vacías y en riesgo pago de la nómina
Se le preguntó por su presupuesto. "¿Cuál dinero?", señaló la flamante jefa policiaca en alusión a que el nuevo gobierno municipal panista encontró que sus antecesores priistas dejaron las arcas municipales vacías, insolvencia que dificulta los pagos para ella y los 13 policías bajo su mando, así como para el resto de empleados y funcionarios municipales.
El primero de noviembre recibirán participaciones federales con el alivio que esto supone para el pago de la nómina y para la contratación de otras cinco mujeres uniformadas.
Marisol, quien estudia criminología en el Centro Cultural Universitario de Ciudad Juárez, sin embargo, está a prueba, de acuerdo al alcalde Guerrero. En caso de que su trabajo sea aceptable, entonces será contratada definitivamente. Por lo pronto, Marisol ha sido centro de atención nacional e internacional y ha recibido ya la solidaridad de expertos de diversas partes del mundo, quienes le han expresado su intención de ayudarla para que cumpla con su cometido lo mejor posible.
"Ya estamos recibiendo ofertas de apoyo incluso de policías virtuales que nos dicen que quieren comentar sobre este aspecto que traemos para ver de qué nos sirve, es decir, nos está llegando mucha información que no teníamos", expresó. Inicialmente, hablar con Marisol no era difícil. Ya que respondía llamadas, pero luego, por cuestiones de seguridad y por el alud de compromisos que tiene, lo relacionado con ella lo está tratando el secretario del ayuntamiento, Javier Alejandro Ceniceros.
La mujer más valiente de México y más
Han sido tantas las solicitudes para entrevistarla que, el presidente municipal admite que, "ha llegado el momento que ustedes -los periodistas- me la podían ahogar".
Se han escuchado comentarios en el sentido de que a falta de hombres con pantalones esta jovencita se lanzó al ruedo. Y por ello se le considera la "mujer más valiente de las mexicanas", como la calificó el diario español El País. Le aplauden su bravura, inteligencia y filosofía.
Esto es lo que se ha dicho en algunos sitios internacionales: "La flamante jefa de policía, pequeña y de trato gentil, dijo que la violencia no la intimida, y que hasta el momento no ha recibido amenazas": el portal sudamericano El Colombiano
"Sólo escribir su nombre provoca respeto y miedo": El País
"Revuelo en México por designación de estudiante como jefa policial cerca de Ciudad Juárez": Tele Sur.
"La joven sheriff", "Heroína mexicana", "País para precoces", y "Con 20 años y mucho valor", son otros titulares de El periódico de Cataluña, Europapress, Diario Vasco y Periódico de Chetumal, entre otros.
"¿No hay hombres en Chihuahua? Mujer de 20 años asume cargo policial": Periodista Digital de Hermosillo, Sonora. Y agrega: "¿Qué pasaría con los hombres? ¿Dónde andan? Sin duda alguna una vez más la enaguas de la bella y valiente mujer de Chihuahua pone (sic) en alto a su región", concluye.
Twitter y la Vírgen de Guadalupe
El nombramiento de Marisol fue abordado por miles de usuarios de Twitter y de otros sitios en Internet.
Es la mujer de moda en México, la que tiene en su escritorio una imagen de la Virgen de Guadalupe y un letrero en honor de Jesús Manuel Holguín, uno de los jefes que la antecedieron, muerto por los disparos de tres sujetos, el 1 de mayo del 2009. "Descansa en paz", dice esa leyenda.