Una mala digestión puede ser por una mala asimilación o una mala eliminación, éstas en casos graves pueden estar juntas.
La digestión normal se manifiesta por un buen procesamiento y asimilaciones del alimento, con heces abundantes, inodoras, cilíndricas y de color bronceado con una frecuencia de 2 veces al día. Una sola evacuación nos indica que los residuos de la digestión y la bilis han sido retenidos más de 20 horas en tu cuerpo.
En la actualidad es cada vez más difícil mantener un organismo limpio y funcionando adecuadamente, debido a la sobre alimentación que incluso a veces la siguen como tratamiento tonificante, siendo un grave error. Como sabemos el organismo sólo aprovecha lo que digiere y no todo lo que come. Para seguir un régimen tonificante debemos de asegurarnos de tener una buena digestión, y lo primero que tenemos que cuidar es la temperatura del tubo digestivo.
Para mejorar nuestra digestión y llenar a nuestro cuerpo de vitalidad, prefiere consumir frutas, verduras y semillas, estos son alimentos muy nutritivos y de fácil digestión, darán un descanso a tu organismo.
Otro punto muy importante para mejorar la digestión es el proceso de masticación, el masticar apresurada e incompletamente produce insalivación insuficiente, lo que es causa de trastornos en el estómago, pues se le impone el penoso trabajo de procesar alimentos mal preparados. La base de una buena digestión esta en la masticación de los alimentos y su mezcla con la saliva. No se puede pedir al estómago que realice una tarea que corresponde a la boca. Una dentadura sana y bien cuidada es importante para evitar focos de putrefacciones que originan indigestiones.
La rapidez con la que deglutimos, fatiga al estómago al obligarlo a atacar de una vez y no parcialmente todo el contenido alimenticio que lo repleta, esto es causa de congestión estomacal que favorece las putrefacciones intestinales y desequilibra las temperaturas del cuerpo.
Aprende alimentarte para conservar o recuperar la salud, mediante una alimentación adecuada a las necesidades de tu cuerpo, digerir alimentos es formar sangre, por lo tanto la digestión normal es fuente de sangre limpia y una digestión incompleta a su vez origina una sangre impura.
fuente yahoo
de Cristina Orendain